Si bien no me había enganchado tanto con las anteriores Bourne -solo había visto la segunda y no me había gustado tanto- tenía muchas expectativas para esta tercera. Por algunos comentarios sueltos que había leido y escuchado tenía la sensación que me la iba a pasar bien. Así fué, "Bourne, el ultimatum" dirigida por Paul Greengrass es una muy buen exponente del cine de acción que se apoya sobre una narración que no da respiro y situaciones resueltan con creatividad y de un modo creible.
Ahora empiezo a entender hacia donde estan virando las peliculas de James Bond, las cuales podrían parecer casi infantiles en comparación con esta.
Como suele suceder con este genero, se hace dificil hablar del acting (aunque Matt Damon es muy creible en su rol), pero no de la compaginación y de los recursos visuales, los cuales le agregan intensidad y dramatismo (especialmente en las peleas y persecuciones).
Otro punto interesante es que la resolución de esta trilogía despierta las ganas de ver sus dos predecesoras, para darle otra mirada a las misiones de Bourne y entender cual era su problemática.
Quizas queda por cuestionar un poco esta "pseudoautocrítica yanqui" contra su gobierno de turno, acusandolo de abuso y mala praxis en su relación con el mundo, lo estoy viendo en tantas series y películas que parecería ser una moda.
1 comentario:
no es una moda lo de la autocrítica yanqui, lo bueno es que para eso hacen muy buenas películas.
Recuerden "nacido el 4 de julio"
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