Antes de escribir esta crónica no sabía que Tony Gilroy, el director de "Duplicidad", era también guionista, es mas ese era su origen. Ahora me empieza a cerrar todo, porque si algo llama la atención en la peli, mas allá del regreso de Julia Roberts, son las vueltas que da el guión.
Gilroy, guionista de "Bourne Ultimatum" y director de la respetable "Michael Clayton", aqui vuelve al genero del thriller, aunque con toques de comedia.
La historia trata sobre la relación de dos agentes/espías (J. Roberts y Clive Owen), a los que en medio de proyectos y romance les cuesta confiar en el otro, y la historia nos lleva de un lugar a otro con situaciones impredescibles que por momentos cuesta entender.
Eso es lo original del guión, la mezcla de la forma en la que está narrado, mas los giros sorpresivos de las actitudes de los protagonistas que no solo confunden a quienes los rodean, sino que por momentos nos dejan a los espectadores un poco en el aire.
Me da la sensación que el director se dió el gusto con el guión complejo, pero mas allá de eso este trabajo no llegó al nivel de su anterior (M. Clayton).
